Como la mayoría de las afecciones estéticas, no sobreviene de improviso, sino que se va gestando poco a poco. Los síntomas de la misma, también se experimentan progresivamente, aumentando temporalmente su intensidad: 

1.     Inicialmente se produce una insuficiencia en el drenaje del líquido intersticial (hábitat del tejido graso) que provocan externamente cambios de volumen pasajeros, sensación de torpeza y pesadez general aunque frecuentemente no existe dolor.

2.     2. Si esta situación se mantiene, el edema o retención se arraiga y espesa. A partir de este momento puede aparecer dolor, cambios de coloración y temperatura en la piel.

3.     3. La persistencia de estas alteraciones funcionales desencadena los síntomas más conocidos de la celulitis: Piel de naranja, mayor volumen de zonas concretas.

4.     4. Por último la desestructuración del tejido es tan intensa que es definida como cicatricial, apareciendo grandes deformidades externas con grandes abultamientos y depresiones en la piel.

¿Cuáles son las causas?

Su origen es desconocido aunque se distinguen algunos factores desencadenantes: HORMONALES.- Las hormonas femeninas alteran el líquido intersticial originando el edema inicial. Esto explica que la celulitis sea una manifestación casi exclusiva de la mujer. HABITOS TÓXICOS Y ALIMENTARIOS.- Una mala alimentación, tanto en cantidad como en calidad; tabaco, café, alcohol… producen una intoxicación interna que origina alteraciones funcionales del tejido subcutáneo. STRESS, ANSIEDAD.- Las situaciones emotivas negativas y el nerviosismo influyen directamente en la producción de hormonas en el organismo, pudiendo provocar vasoconstricción capilar y, por tanto, alteraciones circulatorias. FACTORES MECÁNICOS.- Las variaciones ortopédicas, con desviaciones de columna, asimetrías de la cadera… repercuten en el tejido adiposo; así como el senderismo, calzado y ropa inadecuada que originan trastornos circulatorios e indirectamente celulitis. Un Tratamiento a tu Medida El éxito del tratamiento reside en un correcto estudio de cada caso: DIAGNÓSTICO FISIOLÓGICO LOCAL, para conocer con exactitud la intensidad y evolución del problema y DIAGNÓSTICO GENERAL, que nos permitirá conocer las alteraciones orgánicas que están influyendo negativamente en la afecciónestética. A partir de aquí podremos elegir el tratamiento más idóneo: GENERAL Y ESPECÍFICO. De ello hablaremos el próximo mes.

(Continuará……..)

ESTÉTICA ESPECIALIZADA PARREÑO