Nací en la ciudad (1921) de Tarancón (Cuenca) el 8 de Marzo de 1927, premonición de lo que sería luego: Practicante, Ayudante Técnico Sanitario (A.T.S.), nuestro Patrón en esta profesión es San Juan de Dios, y ese es el día en el que se celebran diversos actos religiosos y lúdicos.

Al empezar la Guerra Civil Española, estaba preparando el ingreso en el Bachiller de aquella época, al terminar la misma, mi querido padre, me empleó de aprendiz, "mancebo" entonces, en una farmacia, la de Don Gabriel Benita, me matriculé en el Instituto Nuestra Señora de Riánsares, nombre de nuestra Patrona, en Sección nocturna, haciendo hasta cuarto, lo exigido para hacer la carrera. Ésta, la hice con matrícula libre, eran dos cursos y aunque sea inmodestia, con nota final de Notable.

Yo puedo presumir de "pionerísimo" en muchas cosas y entonces me hice Cirujano Callista en una Escuela de Especialidades Médicas en Madrid, a la vez que Auxiliar de laboratorio (ya lo era de Farmacia) monté un Gabinete Consulta para el arreglo de los pies, de acuerdo con mi farmacéutico.

Una sobrina de mi "jefe", Doña Manuela Cézar, terminó la carrera de Farmacia, entonces comentó en la "rebotica", él, que buscaría un auxiliar para la que estaban montando, cambié impresiones con mi señora y acordamos venirnos para hacerme cargo de la misma con la titular susodicha, hacía pocos meses que estábamos casados y nos pareció oportuno, pensando en nuestros futuros hijos. Como es lógico de acuerdo en simultanear ambas profesiones.

Servidor como desde los 12 años, ¡un niño!, estaba acostumbrado al trato con la gente enseguida me logré insertar entre ellos, mi esposa le ayudaron mucho unos paisanos taranconeros y vecinos de la casa, yo empecé mi "andadura laboral doble", repartiendo tarjetas de visita profesional.

Los fines de semana hacíamos largos paseos, por una llamada carretera hasta una zona de nombre "Carballal", al principio del barrio, donde sólo existía la Colonia los Ferroviarios, enfrente de la misma, todo eran huertas, viveros y alguna que otra tierra de labor, pero nuestro continuo contacto nos hizo tomarle aprecio.

Vinimos a Madrid en Diciembre de 1957, inauguramos la Farmacia el 11 de dicho mes, en Marzo siguiente tuvimos el primer hijo y en el mismo mes y año 1961 el segundo (José Luis y Francisco, éste último se casó con una salmantina, Feli, y tuvieron un hijo Francisco José, mi ojo derecho, como abuelo, los humanos somos de donde nacemos y donde vivimos, ahora somos una familia de ¡Seis Moratalazeños!), transcurridos rápidamente los meses, llegamos al año 1962, en que compramos el piso, primeros de los que se edificaban con calefacción (las “Viviendas Bravo"), concretamente en el Polígono C, frente a la gasolinera, cuando lo ocupamos mi mujer (Soledad) puso un cuarto de estar, en cuya ventana se pasaban los chicos, horas y horas, viendo ir y venir el "Famoso Tren de Arganda, que pita... más que anda", no existían apenas edificios enfrente del nuestro.

Primeramente fui: Practicante; Cirujano-Callista y Masajista Deportivo (Autodidacta), después tuve que convalidar todos ellos, por: Ayudante Técnico Sanitario (A.T.S.), Podólogo y Fisioterapeuta, trabajando hice Ayudante Técnico Sanitario de Empresa (en ello trabajé solamente unos meses, era imposible abarcar tanto), Auxiliar de Laboratorio y Diplomado en Control Mental (este último muy personal) y aprobé hasta tres oposiciones en las que tomé parte haciéndome cargo de la plaza y renunciando para ganar puntuación en la escala profesional existente, una vez conseguidos 24 puntos, solicité plaza en la Seguridad Social, y mira por donde concedieron plazas con 18,60 máximo, presenté un recurso verbal, me fue reconocido y me dieron la opción de elegir, obligué que crearan una nueva plaza y horario, y así completé mis últimos 17 años, en el Barrio.

Con ¡Cinco Instituciones! que me han impuesto condecoraciones... ¡Agradecidísimo!. Con el Ministerio de Trabajo, que me DEBE, la máxima condecoración ¡NO! y fué pedida reglamentariamente por mis Superiores hace la friolera de ¡12 años!. ¡Ah! y el Excmo. Ayuntamiento de mi pueblo/ ciudad, está en deuda conmigo cumpliendo como hizo con otros hijos ilustres, perdón por la inmodestia, incluyéndome en la nomenclatura de la ciudad.

Anécdota moratalazeña final, como no podía ser menos: Cuando después de luchar los vecinos del Barrio lo indecible, para que se hiciera el Puente sobre la carretera de Valencia, ¡por fin! lo hicieron. Servidor me tocaba atender mis enfermos un fin de semana, llegué con el célebre "600", lo dejé al lado del vallado, retiré el mismo y pasando sobre las piedras, sin asfalto, INAUGURÉ el mismo pasando al Barrio de Doña Carlota, me adelanté al Excmo Sr. Alcalde de la época.

Así fue, en la Biblioteca Nacional, de la que tengo Carné de Investigador, vi que no había ¡un solo libro!, sobre Practicante y profesiones afines, sí una decena, pero sólo anunciando Oposiciones de diversas clases y sus temario. Nuevamente mi "pionerísimo", ahora "nacional", escribí: Practicantes; Ayudantes Técnicos Sanitarios; Diplomados Universitarios de Enfermería y Matronas taranconeros, con más de cien páginas y que está en todas las Bibliotecas de los Colegios Oficiales de A.T.S. y D.U.E., nominación actual, 52 en total. Ahora tengo en imprenta, mi segundo libro, que me entregarán en Noviembre, este sobre DEPORTES, desde nuestros ancestros hasta los actuales deportistas, con título: Historia de TARANCÓN DEPORTIVO, con 400 páginas, primer tomo, habrá un segundo de igual cuantía.