Mucha gente no se habrá dado ni cuenta del rincón en el que vamos a detenernos, un parque situado entre la Avenida Doctor García Tapia y la calle José de Bergamín. Por la cercanía de los jardines de Dionisio Ridruejo, conocidos como el parque de la Esperanza, es posible que no nos hayamos fijado en él. Podría decirse que es una especie de prolongación de éste, pero al lado contrario del Apeadero de Pavones, en el que ya nos hemos detenido. También puede ser que, al ser uno de los más recientes, no pensásemos que se encontraba allí. La calle José de Bergamín, Avenida Doctor García Tapia, etc., han sufrido grandes cambios en los últimos años. Muchas viviendas son de reciente construcción y otras lo están en la actualidad. Con esas numerosas casas, han ido creciendo todos los servicios relacionados con ellas: tiendas, bancos, etc., y, por supuesto, parques. Esto es lo sucedido con esta zona verde. Hasta hace poco, sólo se trataba de campo, por donde los residentes en estas casas encontraban un camino más corto para llegar a Doctor García Tapia. Pero ahora, todo está lleno de árboles, bancos para sentarse, caminos de baldosas, juegos para los más pequeños, etc. Y es que la ciudad ha tenido que adaptarse al gran crecimiento que está sufriendo y con ellos, los parques también, algo que aunque nos parezca innecesario, es útil para nuestras vidas.